Desde que ya no somos como antes
se han quedado vacíos los rincones
que solíamos frecuentar distantes
y ajenos a los demás corazones.
Desde que hemos cambiado, la sonrisa
es un favor que no siempre consigo,
y cuando llega, se marcha deprisa
dejándome la espera por castigo.
Desde aquel suceso, ambos decidimos
que lo mejor sería no tratar
de confundir principios y finales.
Desde que ya no somos lo que fuimos
tanto nos esforzamos por cambiar
que hemos terminado siendo iguales.
"tanto nos esforzamos por cambiar que hemos terminado siendo iguales"
ResponderEliminarno se puede dejar de ser algo que eres inevitablemente...me gustó mucho!
Los dos últimos versos...
ResponderEliminargeniales.
:)
Es genial.
ResponderEliminarEncantada de conocerte,
Salomé.
Me gusta demasiado tu blog :) tanto que he empezado a recomendarlo!
ResponderEliminarEsta entrada me recuerda demasiado algo que me sucedio hace poco. Siento tus entradas como si fueran episodios de mi vida :)